Conoce a los elefantes de Kindred Spirit Elephant Sanctuary

Todas las imágenes son cortesía de Kindred Spirit Elephant Sanctuary

Hemos proporcionado fondos de emergencia a Kindred Spirit y a otros diez santuarios y refugios de alto bienestar en el sudeste asiático para ayudar a alimentar a los elefantes vulnerables.

Con estos fondos los lugares han podido comprar los alimentos que consumen los elefantes, como el tallo de maíz, la hierba Napier y los plátanos. 

Sigue leyendo y conoce a Mae Doom y a otros de los elefantes que residen en Kindred Spirit Elephant Sanctuary

Las elefantas Mae Doom y Too Meh

Mae Doom disfruta de su árbol favorito para frotarse

Mae Doom (en la foto de arriba), una elefanta de unos 20 años tuvo la suerte de haberse reunido en el santuario con su madre, Too Meh, su tía Dodo y su sobrino Gen Thong desde que fue rescatada de un campamento de elefantes que eran explotados en turismo.

Mae Doom y su madre, Too Meh, prefieren su propia compañía y, a menudo, se alejan de los otros elefantes de la zona, subiendo colinas empinadas para encontrar su propio espacio más relajado. A menudo es difícil para sus mahouts saber siempre dónde están.

La pequeña Too Meh.

Los elefantes Dodo and Gen Thong

Gen Thong (derecha) jugando con Boon Rott, el elefante de mayor edad del Santuario.

Dodo y Gen Thong pasan el tiempo en el Santuario junto a la elefanta Prai, a quien conocían anteriormente cuando los 3 eran explotados en campamentos turísticos. El personal de Kindred Spirit dice que ha sido conmovedor verlos a todos reconectar y han notado que Prai busca a los demás elefantes para que le enseñen más del bosque del Santuario.

Dodo tomando lavando el barro de su cuerpo en el río. Los baños de barro ayuda a los elefantes a cuidar su piel. 

En este momento, los elefantes pasan sus días deambulando buscando comida y socializando entre sí. También pasan más tiempo junto a los ríos y arroyos en donde buscan los mejores lugares para tomar un relajante baño de barro, que les ayuda a proteger su piel.

Cuando Dodo llegó al Santuario era agresivo y con comportamiento impredecible debido a los traumas que vivió cuando fue obligado a trabajar en los campamentos turísticos. Pero ahora que tiene un nuevo hogar en el bosque del Santuario, se ha convertido en un elefante muy tranquilo que solo quiere caminar y comer bambú.

Antes de la pandemia de COVID-19, los visitantes venían al Santuario y observaban a Dodo y los demás elefantes en el bosque. Lamentablemente, ahora no hay invitados de visita, pero la rutina de los elefantes sigue siendo la misma. Gracias al apoyo de nuestros donantes, World Animal Protection ha brindado apoyo financiero a Santuarios de alto bienestar en Tailandia. 

Elefantes como Mae Doom, Too Meh, Dodo y Gen Thong son y seguirán siendo espíritus libres. Libres para ser simplemente elefantes y expresar sus comportamientos e instintos naturales, sin tener que ser obligados a trabajar. El sufrimiento va quedando en el pasado. 

Continuaremos garantizando que los elefantes abusados por el cruel comercio de vida silvestre ​​tengan una segunda oportunidad en santuarios de alto bienestar y no les falte el alimento y la atención médica durante la pandemia.

Si quieres ver elefantes, míralos en la naturaleza o visita atracciones genuinas de alto bienestar. Lee nuestra guía turística amigable con los elefantes para asegurarte evitar la crueldad hacia los elefantes en tus vacaciones.

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Con al continúo apoyo de nuestros donantes, los elefantes como Mae Doom, Too Meh, Dodo y Gen Thong ahora tienen libertad de ser elefantes y expresar sus comportamientos naturales.